Parecen haber calmado las aguas políticas que durante más de 6 meses tuvieron a un país en las calles denunciando un sistema educacional que replica la desigualdad económico y social que nos caracteriza en el ranking de la OCDE como. Es este momento de respiro en el que los estudiantes discuten y plantean los posibles escenarios que enfrentará el movimiento, y cuales serán sus perspectivas para reactivar con más fuerza el movimiento social.
Por Nicolás Poblete
Lejos de la inactividad y la derrota, los universitarios durante verano discuten y planifican de que modo el movimiento estudiantil se reintegrará este año para continuar en la lucha por sus demandas.
No obstante, se advierte que habrá cambios en las formas de lucha, se reforzarán las propuestas y los vínculos con otros sectores de la sociedad . Al parecer, el movimiento vive un momento de maduración política en el que las ideas fuerza que sostienen la lucha por la educación parecen dar a luz a una critica seria al modelo social, lo cual llevaría sin lugar a dudas al movimiento estudiantil a disponerse de frente al 2012 como un actor preponderante en la regeneración del movimiento social chileno.
“Si bien- recuerda Juan Pablo Paonessa Vicepresidente de la Federación dela Universidad Católica de Valparaíso (FEPUCV)- pudimos proponer técnicamente como llegar a la educación gratuita y alcanzar un masivo apoyo, tocamos un techo como estudiantes que tiene que hacernos reflexionar para poder saltar sobrepasar ese obstáculo, y demostrar que si ayer fuimos un millón de estudiantes marchando, hoy debemos ser un millón de estudiantes organizados”
En ese sentido Marjorie Cuello, Secretaria General de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Valparaíso (FEUV) explica que “nos dimos cuenta tarde de que los estudiantes no lograran cambios estructurales del país por si solos” lo que emerge casi como necesidad para el movimiento estudiantil, es dejar justamente su carácter netamente sectorial, para comenzar a ser parte de un movimiento social o de masas junto a trabajadores que agrupe a diversos sectores organizados porque -agrega Cuello- “sin la vinculaciónde los actores sociales ni su movilización no podremos transformar a Chile estructuralmente”
El recién elegido Presidente de la Federación de Estudiantes de Concepción (FEC) - Recaredo Galvéz- aclara que esta afirmación se ha hecho fundamental para la victoria del movimiento estudiantil al entender que “detrás de este gobierno hay un conglomerado de empresas y grupo económicos que controlan las políticas del país, a los cuales solo los trabajadores organizados pueden golpear”
Aunque la CONFECh ha recibido el apoyo concreto de varios sectores respecto de sus demandas educacionales, cree que se debe establecer un vinculo más poderoso con los trabajadores y demás sectores de la sociedad “entendiendo lo multisectorial como una lógica de construcción social y no una articulación entorno a una demanda de un solo sector”.
Del movimiento estudiantil al movimiento social
Inconcluso para muchos quedó el alzamiento estudiantil que luego de protagonizar 5.658 marchas durante el año pasado, que durante su desarrollo recibió propuestas “parche” por parte del gobierno, y que al termino del año sus exigencias no tocaron siquiera la Ley de Presupuesto en educación.
La impotencia ante un poderoso aparato que mantendrá a toda costa el orden social y económico nace principalmente no por la intransigente postura de la derecha en el gobierno como achacaban algunos exteriorizando las fallas del movimiento, sino que como el historiador Sergio Grez Toso indica, el decaimiento fue por la casi nula fuerza que presentaron los actores sociales, sobre todo los trabajadores (fundamentalmente la CUT) en los paros productivos, Paonessa añade que “para poder pasar este obstáculo, es necesita una articulación con los demás sectores de la sociedad, que si bien han estado de nuestro lado, han presentado un nivel muy precario de organización, por lo que no se ha podido mostrar el verdadero potencial transformador que tienen los trabajadores”.
En la CONFECh comienzan a ver como un real problema la precariedad de las organizaciones de los trabajadores, las cuales no han demostrado no tener fuerza suficiente para impulsar la construcción de un movimiento social amplio y poderoso. Recaredo Galvez de la FEC,cuenta que en Concepción, ciudad que presentó más vivamente la unión entre distintos sectores, ejemplo claro es la Unión Portuaria del Bío-Bío que paró 4 turnos completos por el movimiento estudiantil, presenta algunas pistas de como la CONFECh pudiera comenzar a tejer a nivel nacional y desde abajo una trama social que permita avanzar a los estudiantes de la construcción de un verdadero movimiento social.
“El primer paso para cualquier tipo de convergencia-explica Galvez- es la de niveles de discusión, por eso hemos acercado fuerzas con el Sindicato de Trabajadores del Cobre (SITECO), la Unión Portuaria, la Federación Nacional de Pobladores (FENAPO), con espacios regionales y nacionales, para ver cuales son sus grados de organización y cuales son los temas que consideran relevantes. Así nos hemos dado cuenta que uno de los ejes articuladores en el plano reivindicativo de este año es la salud”.